Si bien la receta sirve para una única tarta mediana, armar las tarteletas es cuestión de segundos y la presentación queda espectacular. Son una buena forma de que los chicos coman verde.
La masa que usamos fueron tapas de empanadas compradas pero pueden hacer la masa casera y amasar bien los discos para que no tome demasiado protagonismo y se pierda el sabor de la verdura. En cuanto a la salsa blanca, suma mucho pero es preferible no incorporarla a la preparación de las espinacas y agregarla al final en una capa distinta para que los sabores se distingan y no se empasten.
Espero que les gusten y se animen
Ingredientes
- 1 cebolla
- 450 gr espinacas
- 200 gr de ricota fresca
- 25 gr manteca
- 25 gr maicena
- 1/2 lt leche
- sal
- pimienta negra
- nuez mozcada
- moztaza en granos a gusto
- una pizca de ajo seco
- 12 círculos de masa para tarta de 11cm de diámetro y 2mm de espesor
- Queso rallado a gusto
Paso a paso
• Precaliento una sartén profunda y el horno a 180 grados
• Corto la cebolla en cubitos y blanqueo en aceite o manteca durante unos minutos hasta que empiecen a perder color
• Agrego la espinaca previamente lavada y cortada rusticamente. Salpimento a gusto y agrego los granos de mostaza y el ajo
• Si es necesario agrego un chorrito de agua y tapo la sartén. Dejo cocinar durante 2 minutos
• Una vez que las espinacas estén cocidas y bien tiernas, retiro del fuego y agrego la ricota. Reservo
• Preparo la salsa blanca: En una cacerolita caliento la leche con la manteca y cuando empieza a calentar agrego en forma de lluvia y SIN DEJAR DE REVOLVER la maicena hasta que espese.
• En moldes de muffins grandes dispongo los círculos de masa formando canastitas
• Con la preparación de espinacas relleno 3/4 de las canastitas, luego agrego una cucharada de salsa blanca en cada una y termino cubriendo con queso rallado.
• Llevo al horno durante 20-30 minutos, o hasta que dore la masa