Salsa barbacoa casera

Aquí tienes una receta básica para hacer salsa barbacoa casera. Esta salsa es perfecta para acompañar carnes a la parrilla, costillas, pollo a la barbacoa y muchas otras preparaciones. Puedes ajustar los ingredientes a tu gusto para lograr el nivel de dulzura y picante que prefieras.

Ingredientes:

• 2 tazas de salsa de tomate (kétchup)
• 1/2 taza de vinagre de sidra de manzana
• 1/4 de taza de azúcar moreno
• 2 cucharadas de melaza
• 1 cucharada de mostaza Dijon
• 1 cucharadita de salsa Worcestershire
• 1 cucharadita de pimentón dulce
• 1 cucharadita de ajo en polvo
• 1 cucharadita de cebolla en polvo
• 1/2 cucharadita de pimienta negra molida
• 1/2 cucharadita de sal
• 1/4 de cucharadita de chile en polvo (ají picante) o más al gusto (opcional)

Instrucciones:

1. En una cacerola grande, combina todos los ingredientes: salsa de tomate, vinagre de sidra de manzana, azúcar moreno, melaza, mostaza Dijon, salsa Worcestershire, pimentón dulce, ajo en polvo, cebolla en polvo, pimienta negra, sal y chile en polvo (si lo deseas más picante).
2. Mezcla bien todos los ingredientes con una cuchara de madera o una espátula de silicona.
3. Lleva la cacerola a fuego medio-alto y, una vez que la mezcla comience a hervir, reduce el fuego a bajo.
4. Cocina la salsa a fuego lento durante unos 20-30 minutos, revolviendo ocasionalmente para evitar que se pegue en el fondo de la cacerola. La salsa se espesará y tomará un color oscuro y rico.
5. Prueba la salsa y ajusta el nivel de dulzura y picante según tus preferencias personales. Puedes agregar más azúcar o chile en polvo si lo deseas.
6. Una vez que la salsa barbacoa haya alcanzado la consistencia deseada, retírala del fuego y déjala enfriar a temperatura ambiente.
7. Transfiere la salsa barbacoa casera a un recipiente hermético o una botella de vidrio esterilizada y guárdala en el refrigerador. La salsa se conservará durante varias semanas.

¡Ahora tienes una deliciosa salsa barbacoa casera lista para dar sabor a tus platos de carne a la parrilla y otros platos! Puedes utilizarla como marinada, glaseado o simplemente como salsa para sumergir. ¡Disfruta de tus comidas con este toque de sabor ahumado y dulce!